Madrid – El afamado modista francés Christian Lacroix continúa con sus colaboraciones para Desigual. Junto a la que acaba de presentar una última, y completa, colección cápsula —ya a la venta—, con la que no hace sino reafirmar el excepcional compromiso que lo mantiene unido a la conocida firma española. Con la que, a pesar de encontrarse retirado de la primera línea de la moda y de la alta costura, colabora de manera habitual desde hace ya casi 10 años.
“Uno de los orgullos de la casa Desigual es ser la única marca para la que Monsier Christian Lacroix trabaja regularmente”, apuntada la propia firma española a través de un comunicado. “Desde hace nuevo años el creado francés trae a Barcelona inspiraciones barrocas y juegos de parches que, con su estilo inconfundible, transforma en colección cápsula en clave de Street-fashion”. Elementos que una vez más, continúan dominando las líneas maestras de esta última cápsula diseñada por el modista.
“Desigual me invitó a venir a Barcelona y me enamoré. Me enamoré a primera vista”, apunta por su parte Lacroix en relación a la trayectoria que lo mantiene unido a Desigual desde aquella primera colaboración para la temporada Otoño/Invierno de 2020/2011. “Tenemos mucho en común, el mix & match de patterns, de estampados, de colores…”, prosigue el modista. “No intentamos crear tendencias, no estamos aquí para crear el ‘it bag’, estamos cerca de las calles”.
Estampados florales y un “vestido estrella”
Dominada por atractivos y coloridos estampados florales, tan característicos de la firma como del propio modista, la colección se compone por una amplia selección de prendas entre la que encontraremos desde sugerentes vestidos vaporosos con estampados paisajísticos (119,95 euros), hasta pantalones “palazzo” multicolores (109,95 euros); un mono negro floral (99,95 euros); atrevidos pantalones “culotte” de fantasía (89,95 euros rebajados a 62,97 euros); camisas de algodón y seda con manga 3/4 (99,5 euros) o un mono floral (99,95 euros). Encargándose de completar la colección diferentes modelos de vestidos y de tops, así como una línea de accesorios compuesta por bolsos tipo “totebag” (89,95 euros), un bolso “2 en 1” con estampado paisajístico (79,95 euros) o una bandolera de estampado floral (69,95 euros).
De entre todas las piezas, destaca igualmente el que desde la firma han calificado como el “vestido estrella de la colección”. Una prenda de llamativo estampado floral, con largo hasta los tobillos, fruncido a la cintura y escote bajo a la espalda, cuyo diseño de flores se inspira en las láminas botánicas y que ya ha logrado seducir a mujeres como la editora de Man Repeller, Harling Ross; la diseñadora parisina de joyas Adeline Rapon; o la artista indie-pop Laurel.
“Sin duda, este territorio de colores, estampados y de actitud positiva” generarán, al igual que el resto de diseños de la firma, distintas sensaciones “según la propia visión de cada uno”, añade Lacroix en relación a esta última colección. Quizás para algunos resulten una visión “más depurada, estructurada y gráfica”, y “para mí, más similar al pictograma, a lo kitsch, a lo sobrecargado y saturado”. Una diferenciación de perspectivas que “precisamente”, enfatiza, “justifican la propia denominación de la firma: ‘Desigual’; algo dispar, diferente, casi desequilibrado”. “‘Lo bello es siempre raro’, decía Baudelaire, y es esta diferencia la que logra que Desigual atraiga y llame la atención. Si intentas impresionar a todo el mundo, acabarás por no gustarle a nadie, porque perderás tu alma y tu vitalidad. Es necesario posicionarse, tomar decisiones claves, aferrarse a ellas y atreverse a ponerlas en práctica. Hay que saber conservar el tesoro que constituye el corazón de la marca y que ha forjado su imagen y su éxito”. “Como se suele decir”, apostilla, “hay que darle al público aquello que todavía no sabe que quiere”. “Para mí, eso es lo que significa verdaderamente Desigual”.